Berta Pappenheim, más conocida como "Anna O", fue la primera paciente del psicoanálisis. Freud la convirtió en la histérica más famosa de la historia.

Esto se conoció como el caso de Anna O y se convirtió en el comienzo de una disputa de un siglo entre el psicoanálisis y el feminismo sobre el significado de la feminidad.

En primer lugar, Berta Pappenheim nació el 27 de febrero de 1859 en Viena como tercera hija de Recha y Zygmunt Pappenheim.

Sus dos hermanas mayores murieron en la infancia, por lo que creció en el seno de una familia judía acomodada que llevaba dos generaciones dedicándose al comercio de cereales.

Comprender el caso de Anna O.

Anna O. era el seudónimo atribuido a Bertha Pappenheim Aunque hay estudiosos que comentan que el caso fue pasado a Freud, lo que se sabe es que Breuer realizó en solitario este tratamiento (sin Freud). Esta información es confirmada por Freud en su autobiografía. No obstante, el libro es una colaboración entre Freud y Breuer, y el otrocasos de la obra se atribuyen a Freud.

Berta Pappenheim Judía y alemana, conocida por su fuerte personalidad, lideró movimientos sociales en defensa de los derechos humanos, civiles y políticos de la mujer.

Cuando tenía unos 20 años, sufrió la larga enfermedad terminal de su padre. Este factor se sumó a las tensiones de la infancia, lo que generó una afección denominada histeria Esto la dejó con síntomas como depresión, nerviosismo, pensamientos suicidas, parálisis y contracturas musculares en partes de su cuerpo, y alteraciones visuales, entre otros síntomas. Esta situación prácticamente la incapacitó.

Aunque el tratamiento realizado por Breuer fue del fase del método catártico y técnicas de hipnosis Esto se debe a que este tratamiento (como otros de los "Estudios") implicaba un espacio creciente para el discurso del paciente, que sería la tónica de método de asociación libre La propia Anna O. (Bertha) llamaba al tratamiento "curación a través de la palabra".

La enfermedad del padre de Ana O

En julio de 1880, su padre cayó enfermo y, aunque la familia podía permitirse una enfermera, la tradición dictaba que las responsabilidades de enfermería se dividieran entre la esposa y la hija.

Así que Recha se quedaba con el paciente durante el día, mientras que Berta, de 21 años, se quedaba de guardia con su padre por la noche.

Convirtió su vida en una pesadilla de insomnio por el contacto constante con una enfermedad incurable.

Comienzo de la enfermedad de Anna O

Sobre todo, se cree que fue en esta época cuando comenzó la enfermedad de Berta. Sin embargo, las biógrafas feministas de este personaje subrayan que los orígenes de la enfermedad se produjeron mucho antes.

En otras palabras, cuando, a los dieciséis años, tuvo que terminar sus estudios y comenzar la monótona vida de una chica que espera casarse en la casa burguesa de sus padres.

Según el Dr. Joseph Breuer, Anna O. tenía una inteligencia notable, era capaz de combinaciones mentales increíblemente complicadas y una aguda intuición.

No es una enfermedad, sino un síntoma

En 1885, Freud recibió una beca para pasar varios meses en la clínica de Charcot, que en aquella época creó una comunidad científica funcional a su alrededor.

Freud se ocupó principalmente de la histeria en las mujeres e intentó fundamentar científicamente su intuición de que la causa de la histeria era una disfunción sexual determinada psicológicamente.

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En este punto, la concepción psicoanalítica de la histeria coincide con las opiniones de las feministas, para quienes la histeria tampoco es una enfermedad, sino una defensa.

La teoría de Freud

Con el tiempo, la intuición de Freud dio lugar a una teoría que vincula la histeria principalmente a conflictos no resueltos de la primera infancia, basados sobre todo en fantasías o experiencias incestuosas.

En su práctica y reflexión, Freud volvió a menudo a la historia de Anna O que Breuer le contó en 1882 y 1883.

En cierto momento, Breuer se convirtió en la única persona a la que Berta seguía reconociendo. La acompañaba principalmente como oyente.

La teoría del psicoanálisis aún no existía, y su método sólo estaba siendo probado por el paciente y el médico experimental. El medio para llegar al inconsciente paranormal en esta etapa de la historia del psicoanálisis era la hipnosis.

De la hipnosis a la curación a través de la palabra, el caso Anna O.

La hija de los Pappenheim quedó naturalmente hipnotizada. En la segunda mitad del día, su conciencia fue perdiendo intensidad, hasta que finalmente se diluyó tanto que Berta cayó en una especie de trance que ella denominó "nubes".

En este estado de semiinconsciencia, descubrió el origen de sus síntomas. La situación era urgente, ya que el paciente dejó de hablar gradualmente.

Bruer ayuda a Ana O a volver a hablar

Breuer intuyó que Berta Pappenheim se defendía así de decir algo esencial, y la instó a vencer su resistencia. Como resultado de estos esfuerzos, el habla volvió, pero en lengua inglesa.

Más tarde, Berta también utilizó alternativamente el francés y el italiano, y a menudo hacía traducciones rápidas y simultáneas de sus declaraciones a dos o tres lenguas extranjeras a la vez.

El estado de Berta empeora

El padre de Berta murió en abril de 1881, lo que empeoró temporalmente su estado. Posteriormente, la enfermedad de Berta alternó con estados normales, pero persistió un cúmulo de síntomas hasta alrededor de diciembre de 1881.

Retorciéndose de dolor, Berta estuvo a punto de exclamar: "¡Viene al mundo el bebé del doctor Breuer!".

Tal declaración fue percibida como un escándalo moral y asustó a Breuer hasta tal punto que inmediatamente dejó de visitar a los Pappenheim pasando el problemático paciente a un amigo.

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Freud desaprobó la decisión de Breuer, que a su juicio había desertado en un momento crucial.

Más tarde, Berta recibió tratamiento en numerosos sanatorios, hasta que en 1888, seis años después de la rendición de Breuer, ella y su madre se trasladaron definitivamente a Fráncfort. Tenía entonces 29 años.

Cambios en la vida de Anna O

Fráncfort fue una nueva etapa en su vida. Comenzó publicando sus cuentos de hadas y relatos cortos bajo el seudónimo de Paul Berthold, y más tarde también artículos y una obra de teatro sobre la situación social de la mujer.

En 1899, como Paul Berthold, tradujo al alemán "Vindicación de los derechos de la mujer", de Mary Wollstonecraft.

Animada por los parientes de su madre, convivió con los asuntos de la comunidad judía de Fráncfort, al tiempo que se implicaba cada vez más en las actividades del movimiento feminista alemán.

Años importantes para Berta

En 1890, organizó una cocina para refugiados del Este. Más tarde, en 1895, se hizo cargo de la dirección de un orfanato judío y en 1902 fundó Weibliche Fuersorge, una comunidad de atención a los pobres.

En 1904 fundó la Juedischen Frauenbund (Unión de Mujeres Judías), de ámbito nacional, y en nombre de esta organización, como presidenta y delegada, participó en varios congresos femeninos.

A principios de 1917 se convirtió en una destacada activista en el centro del bienestar judío en Alemania y dedicó gran parte de su fortuna personal al trabajo social.

Consideraciones finales

Berta murió el 28 de mayo de 1936 en Fráncfort. La casa que fundó en Neu Isenburg fue cerrada por los nazis en 1942 y todas las mujeres que aún quedaban allí fueron deportadas a Auschwitz.

Cuesta creer que se trate de la misma persona que en la Viena de finales de siglo se atormentaba a sí misma y a su entorno con ataques de histeria.

La valentía y el empuje de Anna, visibles en sus actividades sociales, son más que suficientes para mostrar una psique sana Es posible encontrar el caso Anna o en las obras completas de Freud, si desea obtener más detalles sobre este caso.

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