Trastorno explosivo intermitente (TIE): causas, signos y tratamiento

George Alvarez 02-10-2023
George Alvarez

El trastorno explosivo intermitente, también popularizado como "síndrome de Hulk", es una afección psicológica consistente en arrebatos de ira y comportamientos agresivos.

Entender el trastorno explosivo intermitente

Las personas que padecen esta enfermedad no pueden controlar sus impulsos violentos y descargan su frustración contra personas u objetos. Son individuos incapaces de controlar sus impulsos agresivos o ataques de ira, siendo totalmente desproporcionados. En un ataque de ira normal, la persona siente el impulso de acabar con la situación que le ha llevado a ese sentimiento, pero este impulso se frena rápidamente.

En el Trastorno Explosivo Intermitente, la situación que provocó el sentimiento es totalmente desproporcionada al estallido de ira, con agresividad y rotura de objetos. La diferencia está en la intensidad de la ira y la frecuencia de los estallidos. La ira es un sentimiento normal, es una respuesta emocional a situaciones en las que una persona se siente frustrada, amenazada, agraviada o herida. El Trastorno Explosivo Intermitente (TIE), por su parte, es un trastorno en el que la persona tiene arrebatos de ira con frecuencia, unas 2 o 3 veces por semana, durante aproximadamente 3 meses, y con una reacción exagerada o desproporcionada al arrebato de ira.

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Generalmente, en estas crisis, la persona no puede controlar sus impulsos y puede romper objetos, tirar cosas al suelo o perder el control sobre la agresividad verbal o física de la otra persona. Las personas con TEI son personas con "mecha corta", a las que parecen gustarles las peleas debido a la cantidad de conflictos que provocan allá donde van.

Trastorno explosivo intermitente y descontrol emocional

Un comportamiento muy irritable es indicativo de una extrema falta de control emocional, especialmente en relación con la ira. Son personas que también hacen interpretaciones erróneas de los acontecimientos debido a la ira. Se les considera personas difíciles en los entornos que frecuentan.

Los síntomas más comunes son daños corporales o morales sin causa justificada, ataques de ira, aceleración de la respiración y de los latidos del corazón, falta de control de la actitud, sudoración y temblores en el cuerpo, impaciencia, irritabilidad fácil y arrebatos repentinos de cólera. Normalmente, después de una crisis la persona se arrepiente de lo ocurrido.

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Se da cuenta de que el suceso se ha exagerado totalmente y se siente incómoda por lo que ha hecho, y puede tener miedo de que el problema se repita. Los ataques de ira pueden estar relacionados con el estrés, la depresión, el trastorno bipolar de la personalidad y otros problemas. Se cree que la causa del Trastorno Explosivo Intermitente es un componente genético. Se transmite de padres a hijos, especialmente en familias con otros trastornos como el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad y la Ansiedad Generalizada.

Cuando aparece el Trastorno Explosivo Intermitente

Este trastorno suele aparecer con los cambios de la adolescencia, generalmente después de los 16 años, y se consolida en la edad adulta. En algunos casos, los primeros síntomas pueden aparecer más tarde, entre los 25 y los 35 años, y es más recurrente en los hombres. El SII suele aparecer de forma concomitante con otros trastornos mentales, como la depresión, el trastorno bipolar y la ansiedad. El consumo prolongado de sustancias también conduce a esta afección. Los niños también pueden desencadenar los síntomas del TIE u otros trastornos que provocan irritabilidad y comportamiento impulsivo.

Es normal que los niños resuelvan los conflictos con actitudes violentas porque no tienen un buen control emocional. Corresponde a los padres enseñarles formas más eficaces de resolver los problemas. El niño que se muestra siempre irritable y parece incapaz de aprender a resolver los conflictos de otras maneras debe ser llevado a un psicólogo.

El profesional evaluará el estado emocional del niño, identificando la presencia de elementos patológicos, ya que la TEI es más frecuente en adolescentes, es probable que los desajustes conductuales del niño estén relacionados con otras afecciones psicológicas, como el TDAH (trastorno por déficit de atención con hiperactividad) o el trastorno de conducta. Se ha determinado que la mayoría de las personas que padecen este trastorno crecieron en familias o asistieron a entornos en los que el comportamiento agresivo se consideraba normal.

Conclusión

El contacto recurrente hace que algunos individuos interioricen estas actitudes como comunes Para que una persona sea diagnosticada de SII, su comportamiento y sus sentimientos deben corresponder a una serie de criterios. Los ataques de ira son factores observados por los profesionales sanitarios. Esta evaluación es necesaria para determinar si el comportamiento de la persona rabiosa es, de hecho, patológico. Algunas personas se enfadan con más facilidad que otras, pero eso no significa que padezcan un trastorno explosivo intermitente.

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El Manual de Diagnóstico de los Trastornos Mentales clasifica la ira en 2 categorías: las consideradas leves son las amenazas, los juramentos, los insultos, los gestos obscenos y la agresión verbal. Las consideradas graves incluyen la destrucción de bienes y las agresiones físicas con lesiones corporales. Estas muestras de ira pueden producirse al menos 3 veces al año.

En ambos casos, es probable que una gran proporción de los arrebatos de ira estén motivados por cuestiones superficiales y sucesos cotidianos. El individuo debe hacer un seguimiento con un psicólogo para aprender a controlar sus emociones y expresar la ira de forma sana. El tratamiento también puede realizarse con la ayuda de fármacos psiquiátricos, prescritos por el psiquiatra, para suavizar la intensidad de los síntomas. La necesidad de la ingesta de fármacos se define a lo largo del tratamiento.

Este artículo fue escrito por Thaís de Souza ( [email protected] ), carioca, 32 años, estudiante de Psicoanálisis en el IBPC.

George Alvarez

George Alvarez es un psicoanalista de renombre que ha estado practicando durante más de 20 años y es muy respetado en el campo. Es un orador solicitado y ha realizado numerosos talleres y programas de capacitación sobre psicoanálisis para profesionales de la industria de la salud mental. George también es un escritor consumado y es autor de varios libros sobre psicoanálisis que han recibido elogios de la crítica. George Alvarez se dedica a compartir su conocimiento y experiencia con otros y ha creado un blog popular sobre el Curso de capacitación en línea en psicoanálisis que es ampliamente seguido por profesionales y estudiantes de salud mental en todo el mundo. Su blog ofrece un curso de formación integral que cubre todos los aspectos del psicoanálisis, desde la teoría hasta las aplicaciones prácticas. A George le apasiona ayudar a los demás y está comprometido a marcar una diferencia positiva en las vidas de sus clientes y estudiantes.